Pues yo, cuando estuve en Cangas no vi el puente; y mira que estuve bastante tiempo ......... en una bodega con el suelo de cemento, una enorme viga en el techo y otras antiguallas de madera, un cierto olor avinagrado (riquísimo), unas tablas con quesos y setas y un tío que se empeñaba en echar líquido en el vaso desde encima de la cabeza, botella tras botella, y ......... ya no me acuerdo de más.
Pero ¿puente? ¿Ande queda eso ...? je,je,je,je
Que buenos recuerdos y que bonito, y fuerte, es el puente. ¡¡Que si lo vi, hombre!!
Saludos.